La Dracaena marginata, o dracena roja, es una planta de interior popular que se adapta bien a macetas. Para cuidarla correctamente, es importante proporcionarle luz indirecta brillante, riegos moderados dejando secar la tierra entre riegos, humedad ambiental, y una temperatura cálida y estable. Cuidados específicos de la Dracaena marginata en maceta:
- Luz:Prefiere lugares bien iluminados, pero evita la luz solar directa que puede quemar sus hojas.
- Riego:Necesita riegos moderados, permitiendo que la tierra se seque entre riegos para evitar la pudrición de las raíces. Un exceso de riego es más perjudicial que la falta de agua.
- Humedad:Aunque no requiere mucha humedad, aprecia un ambiente húmedo, especialmente en climas secos. Puedes aumentar la humedad colocando la maceta sobre un plato con piedras y agua (sin que el agua toque la base de la maceta) o rociando agua sobre las hojas ocasionalmente.
- Temperatura:Prefiere temperaturas cálidas, idealmente entre 18-24°C, y no tolera temperaturas inferiores a 14°C.
- Sustrato:Utiliza una mezcla para macetas que drene bien para evitar encharcamientos.
- Maceta:Elige una maceta con agujeros de drenaje para evitar el exceso de humedad.
- Trasplante:Trasplanta la planta cada dos años, preferiblemente en primavera, para renovar el sustrato y darle espacio para crecer.
- Fertilizante:Puedes abonar la planta durante la primavera y el verano, utilizando un fertilizante líquido diluido a la mitad de su concentración, cada 4-6 semanas.
- Poda:Retira las hojas secas o dañadas para mantener la planta saludable y fomentar un nuevo crecimiento.