Para cuidar una sansevieria, o lengua de suegra, es importante proporcionarle luz indirecta y evitar el exceso de riego. El sustrato debe estar seco antes de volver a regar, y la temperatura ideal está entre 18 y 24 grados Celsius. Luz: La sansevieria prefiere lugares bien iluminados, pero no tolera la luz solar directa, que puede quemar sus hojas. Si no recibe suficiente luz, su crecimiento se ralentizará, pero no morirá. Riego: Es crucial evitar el exceso de riego, ya que la sansevieria es susceptible a la pudrición de la raíz. Es mejor regar poco y con poca frecuencia, esperando a que el sustrato esté completamente seco antes de volver a regar. En primavera y verano, riega cada dos semanas, y en otoño e invierno, una vez al mes es suficiente. Temperatura: La temperatura ideal para la sansevieria está entre 18 y 24 grados Celsius, aunque puede tolerar temperaturas más altas en verano y hasta pequeñas heladas de hasta 3 grados. Sustrato y maceta: Utiliza un sustrato para cactus y suculentas, que drene bien. Asegúrate de que la maceta tenga agujeros de drenaje para evitar el encharcamiento. Abono: Puedes abonar la planta una vez al mes durante la primavera y el verano, utilizando un fertilizante para cactus y suculentas. Trasplante: Trasplanta solo cuando sea necesario, cuando las raíces salgan por los agujeros de drenaje de la maceta. Utiliza una maceta ligeramente más grande que la anterior y con buen drenaje.